En los últimos años, el avance de la tecnología y las posibilidades ilimitadas de comunicación entre las personas, permiten a las empresas establecer mejores vías de interacción con los posibles clientes.
Una de estas nuevas vías son las aplicaciones móviles. Aplicaciones informáticas diseñadas para ser ejecutadas en teléfonos inteligentes, tablets y otros dispositivos móviles.
Numerosas empresas están cerrando acuerdos de colaboración con algunas de las compañías tecnológicas líderes en el sector. Entre ellas se encuentra Apple o Samsung.
Según un estudio de la firma Vanson Bourne para CA Technologies la satisfacción de la mayoría de los usuarios respecto a las aplicaciones móviles es bajo. Como comentó Denise Duble (ejecutiva de estrategia de contenidos de CA) en el Congreso Mundial Móvil (MWC) realizado en Barcelona “solamente el 20% de los consumidores de las compañías están completamente satisfechos con sus experiencias”.
En nuestro país el aumento en presupuesto e inversión tecnológica por parte de las empresas está creciendo. Y es que España es líder europeo en cuanto a tasa de penetración de smartphones, ocho de cada diez móviles son teléfonos inteligentes. Ferias como el MWC confirman esta tendencia y anticipan que las aplicaciones móviles nos permitirán realizar una parte importante de nuestro trabajo sin la necesidad de encender el ordenador.
Mark Zuckeberg, fundador y CEO de Facebook, afirmó durante su intervención en este congreso, MWC, que “las aplicaciones marcan el futuro”.
Pero… ¿Son realmente necesarias las apps para las empresas? Depende del contexto de la compañía, lo que si queda claro es que el uso de dispositivos móviles es amplio por parte de los usuarios y les sirve de gran utilidad. Queda también patente que los grandes gurús del sector apuntan en esta nueva dirección como la mejor vía para atraer al cliente y generar un negocio competitivo. Pero veamos más ventajas:
–Fidelización. Estar presente en un teléfono inteligente mejora la imagen que el público tiene de la empresa, también genera un mayor tráfico de visitas en comparación al sitio web. Con una app, el nivel de personalización que podemos lograr es mucho mayor sin incurrir en unos costes demasiado altos. Un ejemplo es Negoapp, aplicación cuyo objetivo es dar acceso a comercios y negocios con clientela recurrente a poder tener su propia app como herramienta de marketing y fidelización.
–Desarrollo tecnológico a menor precio. Capacidad de ofrecer a los usuarios aplicaciones potentes, creativas y sofisticadas a un bajo coste. Existen generadores de apps que no incluyen una gran inversión monetaria. Un ejemplo de ello es Adiante, se caracteriza por su sencillez de uso y posibilidad de crear aplicaciones avanzadas.
-El mercado está preparado. Los usuarios manejan y comprenden en gran medida la nueva tecnología y son más receptivos a probar nuevas aplicaciones y a generar un feedback que ayude a la empresa a optimizar sus servicios.
-Los mecanismos que miden el número de descargas de una aplicación aportan datos valiosos como el número de personas interesadas en la empresa y la cantidad de replicas de información dentro de la app. Algunos ejemplos de ello son las aplicaciones de comercios electrónicos como Ulabox o Consum.
-Uso y disponibilidad. Pueden acceder donde y cuando quieran lo que se traduce en un incremento del volumen de ventas de tu negocio y la satisfacción de tus clientes.
La realidad es que la tecnología ha llegado para quedarse y la mayoría de tu público objetivo está utilizando todos los días, varias veces al día, sus dispositivos móviles. ¿Te vas a arriesgar a no estar presente?
