¿Cómo contabilizar un préstamo bancario?

Para conocer como contabilizar un préstamo bancario vamos a emplear el siguiente ejemplo:

Una empresa formaliza el 1 de enero de 2008 un préstamo con el banco por importe de 600.000 euros a 3 años a un tipo de interés del 7,5% con unos costes financieros de apertura de 30.000 €, 15.000 € de gastos jurídicos y 5.000 € de timbres.

En primer lugar, tendremos que tener en cuenta el cuadro amortización bancario (se está aplicando el método francés de cuota constante)

Para conocer el coste verdadero de la operación el Banco de España obliga a las entidades financieras a que comuniquen a sus clientes el TAE (tasa anual equivalente), es decir, al tipo de interés nominal del préstamo le hemos de incorporar aquellos gastos de naturaleza financiera de forma que las diferentes estrategias comerciales de la banca no induzcan a error a los clientes y a su vez se potencia la transparencia y la comparabilidad entre diferentes propuestas financieras. En este momento es preciso tener en cuenta, y es algo evidente, que el coste de nuestro préstamo no se reduce a tener en cuenta el tipo de interés del 7,5%, si no que existen otra serie de gastos que hace que se incremente el coste de la operación.

Ejemplo de sobre reconocimiento de préstamo bancario

Sin embargo, en nuestro ejemplo tenemos además una serie de gastos no financieros que también incurrimos a consecuencia de la transacción y que la encarecen.

Por tanto, esos gastos que no forman parte del tipo de interés nominal los tendremos que imputar financieramente durante toda la vida del préstamo para lo cual calculamos el tipo de interés efectivo.

600.000 – 30.000 – 15.000 – 5.000 = 230.722,58 a_(3;tie)

El tipo de interés efectivo es del 12,44% (aprox.).

Con ese nuevo tipo de interés efectivo elaboraremos un cuadro de imputación financiera de capitales en el cual tenemos en cuenta los gastos iniciales y su prorrateo durante el tiempo que dura el préstamo.

Por otra parte, reconocemos la parte del préstamo que vence a corto plazo, es decir, una cuota y la parte que vence a largo plazo, es decir, dos cuotas. Sin embargo, para estos importes tenemos en cuenta nuestro cuadro de amortización financiero-contable y no el proporcionado por el banco.Reconocemos como deuda el importe que efectivamente hemos obtenido del préstamo, es decir, del total solicitado 600.000 € le tenemos que quitar todos los gastos iniciales y obtenemos 550.000 €.

Al cierre del año tenemos que reconocer el gasto por intereses y la parte de los gastos iniciales que imputamos financieramente.

Tenemos que reconocer los intereses nominales del préstamo:

600.000 x 7,5% = 45.000 que formarán parte de la cuota financiera del banco.

Por otro lado, reconocemos el gasto financiero del préstamo según el tipo de interés efectivo, que según nuestra tabla de amortización financiero-contable es de 68.416,19. La diferencia entre ambos importes es justamente la cuantía en la cual tendremos que incrementar la cuota de amortización contable del segundo cuadro para obtener justamente la cuota de amortización bancaria, que es el primer cuadro.

Realizamos el pago de la primera cuota y reclasificamos el vencimiento de la siguiente según el cuadro de amortización financiero-contable.

Aquí va el siguiente vídeo educativo que explica de manera gráfica estos asientos:

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Publicado por: Carlos Gutiérrez Gómez.