BIG DATA: ES UNA CUESTIÓN DE CANTIDAD Y CALIDAD

Los expertos en marketing digital califican a los datos como el petróleo del siglo XXI. Gracias a ellos, las empresas pueden llegar a conocer mejor a sus clientes, ofrecerles un trato personalizado y prestarles mayor atención. Hace años el manejo de estos datos sólo interesaba a lo informáticos, mientras que actualmente no hay departamento de marketing que no base su estrategia en torno a este tipo de información. El Big Data es el futuro.
Sus usos son múltiples: desde la utilización de sensores de presencia en semáforos para mejorar la circulación, hasta inmobiliarias que relacionan el nivel de delincuencia de un barrio con la ubicación de las viviendas, pasando por ofertas comerciales vinculadas con la posición geográfica del posible cliente.
La importancia del Big Data reside tanto en el volumen como en su valor potencial. El poder revolucionario del marketing de datos está en la posibilidad de rastrear las opiniones de los usuarios en redes sociales, en predecir sus hábitos de consumo y comportamiento y en adelantarse a sus necesidades. Tener acceso a estos datos evitaría riesgos económicos para el negocio, daría lugar a campañas publicitarias mucho más certeras y mejoraría la toma de decisiones en la estrategia empresarial.
La operadora telefónica T-Mobile se propuso reducir el número de portabilidades de sus clientes hacia sus competidoras. Para ello empleó el marketing de datos, analizando las opiniones de sus usuarios en las redes sociales, y la influencia de dichos comentarios, así como la facturación y los sistemas de cobro. La compañía consiguió reducir en un 50% las portabilidades en tan sólo un cuatrimestre al enviar ofertas especiales a cada cliente. La operadora encontró la solución en ofrecerle lo que necesitara específicamente antes de abandonar la compañía.
Por su parte, la cadena inglesa de supermercados Tesco rastreó los datos de ventas de 16 millones de familias que usaban Tesco Clubcards y acumulaban puntos de descuento. Gracias a esto Tesco incrementó un 12% sus ventas durante los primeros ensayos al utilizar el análisis de datos para determinar qué artículos top debía descontar y qué ofertas promocionar.
Otro ejemplo más visual de Big Data vino de la mano de “Moneyball”. La película representaba la estrategia estadística aplicada por Billy Beane, manager general de Oakland Athletics, en el baseball. Éste se percató de que los datos relacionados con los puntos marcados, las carreras y ensayos influían enormemente y los aplicó en la tasación de los jugadores y el mercado de fichajes.
Sin embargo, a pesar del crecimiento exponencial del Big Data, todavía queda mucho camino por recorrer. En concreto, en España, el marketing de datos se enfrenta a las leyes y políticas de privacidad y protección de datos personales. Así mismo, los expertos afirman que es obvia una falta de formación en este campo así como la implementación de una nueva arquitectura tecnológica para facilitar el acceso a esta preciada información. Pero estos terrenos se están poniendo al día, ya que numerosas universidades y escuelas están ya ofertando titulaciones y cursos especializados en marketing de datos y su aplicación a las distintas industrias. También, cada vez son más las empresas que han surgido para dar solución tanto en la gestión como almacenamiento de estos preciados datos, como Pragsis con la aplicación Bidoop o Google con su plataforma Cloud BigTable.