El Project Finance es una herramienta clave para financiar grandes proyectos de infraestructura, energía y transporte, mediante la creación de un ‘vehículo de propósito especial’ (SPV), que actúa como una entidad legal independiente que asume los riesgos y responsabilidades del proyecto. Este modelo se diferencia por depender de los flujos de efectivo generados por el propio proyecto, en lugar de los activos o solvencia de la empresa matriz, y es comúnmente utilizado en desarrollos como plantas de energía, carreteras y puentes.

Fernando Moroy, docente de la UEMC Business School, matiza que el Project Finance o Financiación Estructurada es un mecanismo de financiación apalancada con recursos limitados. ¿Esto que quiere decir? Que la financiación «depende principalmente de la capacidad de generación de flujos de caja del proyecto que se utiliza para el repago de la deuda versus una financiación tradicional en la que lo más importante es el valor de los activos que sirven como colateral».

En los últimos años, el Project Finance ha evolucionado para adaptarse a las nuevas realidades económicas y ambientales. Aunque el 2023 registró una ligera caída del 1.26% en operaciones, el 2024 comenzó con un repunte, impulsado por la creciente demanda de infraestructuras sostenibles y la transición energética. Este enfoque sigue siendo esencial para grandes inversiones de capital, permitiendo que el riesgo y el retorno dependan del éxito operativo del proyecto.

Tendencias en Project Finance

1. Incorporación de criterios ESG (Environmental, Social, Governance)

• El auge de la sostenibilidad: la creciente presión para integrar prácticas sostenibles ha transformado el Project Finance. Ahora, los criterios ESG son fundamentales en la evaluación y estructuración de proyectos, ya que los inversores y financiadores demandan proyectos que no solo sean rentables, sino que también generen un impacto positivo en el medio ambiente y las comunidades.
• Bonos verdes y sostenibles: estos instrumentos financieros han ganado popularidad como parte de las estructuras de Project Finance. Los bonos verdes sirven para financiar proyectos ecológicos, como parques eólicos o plantas solares, alineando los objetivos financieros con los ambientales.

2. Digitalización y tecnología financiera

• Blockchain y contratos inteligentes: la digitalización ha llegado al Project Finance a través de tecnologías como blockchain, que ofrecen transparencia y seguridad en las transacciones. Los contratos inteligentes automatizan y garantizan el cumplimiento de los términos financieros, reduciendo así los riesgos asociados a los pagos y al cumplimiento de hitos.
• Análisis de datos y Big Data: la capacidad de procesar grandes volúmenes de datos permite a los financiadores evaluar riesgos y oportunidades con mayor precisión, optimizando la estructura financiera de los proyectos.

3. Nuevos modelos de financiación

• Crowdfunding y microfinanciación: aunque tradicionalmente limitado a pequeños proyectos, el crowdfunding ha comenzado a explorarse como una herramienta complementaria en la financiación de grandes proyectos, especialmente aquellos con un fuerte componente social. Plataformas especializadas permiten que pequeños inversores participen en la financiación de proyectos de infraestructura.
• Financiación mixta (blended finance): esta modalidad combina fondos públicos y privados para financiar proyectos esenciales para el desarrollo pero que presentan un perfil de riesgo alto. Las asociaciones público-privadas (APP) se han beneficiado de esta estrategia, permitiendo que proyectos de infraestructura y energía en países en desarrollo avancen.

Evolución y expansión del Project Finance

1. Expansión en sectores emergentes

• Transición energética: la necesidad de reducir las emisiones de carbono ha impulsado la financiación de proyectos relacionados con energías renovables. En países en desarrollo, el Project Finance se ha convertido en una herramienta clave para facilitar la transición hacia fuentes de energía más limpias.
• Tecnología e innovación: proyectos de gran escala en el ámbito tecnológico, como la construcción de centros de datos y redes de telecomunicaciones, están recurriendo cada vez más al Project Finance.

2. Mayor enfoque en la resiliencia y adaptación

• Infraestructura resiliente: la creciente frecuencia de eventos climáticos extremos ha llevado a un enfoque renovado en la financiación de proyectos de infraestructura que sean resistentes al cambio climático. La resiliencia se ha convertido en un factor crítico en la evaluación de riesgos y la estructuración de los financiamientos.
• Proyectos de adaptación: existe un creciente interés en financiar proyectos que se centren en la adaptación a estos cambios, como la construcción de diques, la gestión del agua y la agricultura sostenible.

El Project Finance sigue siendo una herramienta vital para la financiación de grandes proyectos, adaptándose a tendencias emergentes como los criterios ESG, la digitalización y nuevos modelos de financiación. La estructuración, gestión y desarrollo de grandes proyectos a través de Project Finance, siguen avanzando y es fundamental adquirir una formación sólida y actualizada. El Máster Oficial en Dirección Financiera de UEMC ofrece una oportunidad excepcional para desarrollar las habilidades y conocimientos necesarios en este campo.