La desmotivación entre los trabajadores es un problema actual. La pandemia ha sido una de las causas que ha propiciado esta situación, puesto que ha cambiado la forma de trabajar y ha aumentado la carga emocional y el estrés en las personas. A esto se le suman los bajos salarios, la falta de oportunidades de crecimiento profesional, la incertidumbre económica que vivimos y los escasos incentivos laborales que ofrecen las organizaciones.

José Vera, docente del Máster Oficial en Dirección y Gestión de Personas de la Escuela de Negocios de la UEMC, explica que “existe una fuerte desmotivación laboral entre la juventud española generada por la falta de oportunidades para encontrar empleo o cambiar de empresa. Creo que no se dan las condiciones favorables para que las empresas se animen a contratar aunque, por otra parte, tampoco se encuentran en el mercado de trabajo los perfiles adecuados para las vacantes que se crean”.

Actualmente es complicado conocer una cifra exacta sobre la desmotivación general que viven los trabajadores porque son muchos los factores que intervienen (ubicación geográfica, economía, cultura), pero un estudio realizado por Adecco afirmaba ya en 2019 que hasta el 60% de los trabajadores estaban insatisfechos con su trabajo. 

Incentivos laborales que puedes implementar

Hemos visto que las empresas tienen que actuar y contribuir a la motivación de sus empleados con medidas que mejoren su satisfacción y bienestar en el entorno laboral. Esto, además de suponer beneficios para el negocio, como la mejora de la productividad y la mejora de resultados, también puede ayudar a la retención del talento y atraer a nuevos empleados.

José Vera, apunta que “en estos tiempos tan «VUCA» que nos toca vivir, los mejores incentivos laborales son la estabilidad y seguridad. Es muy desmotivante para cualquier persona tener que firmar hasta tres contratos indefinidos en un mismo mes. Poder ofrecer un proyecto de trabajo estimulante, con futuro, me parece básico. Soy consciente de que el empleo vitalicio ha muerto, pero poder ofrecer una cierta continuidad en el empleo es algo que ayudaría mucho a mejorar el ánimo de cualquier empleado”.

Veamos cuáles son algunos de los incentivos que más se emplean hoy en día:

1. Bonificaciones económicas por desempeño: Recompensar directamente a los empleados en función de su rendimiento individual o del equipo.
2. Tiempo libre y días de descanso adicionales: Ofrecer días libres o días adicionales de descanso como recompensa por el buen trabajo, como por ejemplo el día de su cumpleaños.
3. Programas de desarrollo profesional: Dar la oportunidad de capacitación, entrenamiento y desarrollo de habilidades para apoyar a los empleados en su crecimiento profesional.
4. Reconocimiento público: Reconocer públicamente el buen desempeño de los empleados, ya sea a través de un programa de premios interno o en una reunión de equipo.
5. Flexibilidad y teletrabajo: Permitir a los empleados trabajar desde casa o tener horarios más flexibles como recompensa por su buena ejecución de sus funciones. “El teletrabajo es una solución muy cómoda para el empleado, económica para el empleador y ecológica para el conjunto de la sociedad, pero cada empresa tendrá que analizar cuál es la fórmula que mejor se adapta a sus características y necesidades”, nos cuenta el experto en Recursos Humanos.
6. Beneficios adicionales: Seguros médicos, de vida, entre otros.
7. Entorno de trabajo agradable: Espacio de trabajo cómodo, con facilidades que pueda disfrutar el empleado.

Sin embargo, hay empresas que disponen de poco capital y que no pueden ofrecer estos tipos de incentivos laborales, por lo que cada organización tiene que buscar lo que mejor se adapte a sus posibilidades y a su equipo.

Cómo aumentar la productividad de tus trabajadores

Existen varias estrategias que puedes utilizar para conseguir que tus trabajadores sean más productivos. Sin embargo, antes de ponerlas en marcha, el propio empleado tiene que entender cómo su trabajo contribuye al éxito del negocio en general para que sepa el valor que aporta a la empresa. José Vera afirma que “la mejor fórmula para fortalecer el espíritu de un equipo es la de definir muy bien cual es el objetivo que debe alcanzar cada uno de sus miembros, tomando conciencia de la importancia y la repercusión que tiene su trabajo en el conjunto de la empresa”.

Otra opción para mejorar la productividad de tus trabajadores es proporcionarles herramientas y tecnologías que les permitan realizar su trabajo de manera eficiente. Esto también ayudará a fomentar un ambiente de trabajo positivo y aumentar el rendimiento del capital humano.

Las oportunidades de aprendizaje y desarrollo profesional pueden ayudar a tus trabajadores a mejorar su capacitación y obtener más habilidades y conocimientos. Además, como otra opción de oferta de incentivos laborales, puedes proporcionar un paquete de compensación atractivo y justo que incorpore beneficios y un salario competitivo.

Por último, fomenta la comunicación abierta y la colaboración con tus empleados para que puedan expresar cómo se sienten sin temor a represalias y mejorar así la eficiencia en el lugar de trabajo. 

Si tienes interés en el área de recursos humanos y quieres comenzar a gestionar y liderar personas, la Escuela de Negocios de la UEMC dispone de una gran oferta formativa para que puedas elegir el programa que mejor se adapta a ti. ¿A qué esperas?